En la bulliciosa Nápoles del siglo XVIII, donde la pizza ya era un símbolo popular, surgió el calzone: una pizza doblada en forma de media luna que podía comerse fácilmente en la calle, sin necesidad de plato ni cubiertos. Su nombre significa “pantalón”, en referencia a esa forma práctica de “guardar” la pizza dentro de una masa crujiente.
De la calle al restaurante
Con el tiempo, el calzone se extendió por toda Italia y el mundo, conquistando paladares por su practicidad y por la sorpresa que esconde en su interior. Cada región le dio su toque:
- Rellenos con embutidos
- Quesos
- Vegetales
- Incluso versiones modernas con ingredientes gourmet
El calzone en Rossini
En Restaurante Rossini hemos reinventado esta tradición napolitana con propuestas irresistibles:
- Calzone clásico: relleno de tomate, mozzarella, ricotta, jamón york y champiñones.
- Calzone fantasía: con jamón york, beicon, champiñones y salchichón picante.
- Calzone burger: una fusión sorprendente entre nuestra masa de pizza y la jugosidad de la hamburguesa.
Cada calzone es una experiencia distinta, donde lo mejor está escondido en su interior.
Sorpresa y creatividad en cada bocado
El calzone es mucho más que una pizza doblada: es un plato que juega con la expectativa, combina tradición e innovación y refleja el espíritu napolitano de disfrutar la comida en cualquier momento y lugar.
Atrévete a descubrir lo que esconde nuestro calzone. En Restaurante Rossini, cada calzone es una sorpresa deliciosa: del clásico napolitano a la versión burger que rompe esquemas.
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